La Subsecretaria de Desarrollo Urbano y Ordenación del Territorio de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), Sara Topelson criticó los esquemas de vivienda que se han permitido en el país, advirtiendo un problema grave si no se reordenan las ciudades pues la demanda en vivienda estimada de 2009 a 2020 es de 11 millones.
En el marco del Congreso Internacional de Arquitectos “Ciudades vivas y sus Centros Históricos” acotó que el crecimiento de la vivienda que se ha dado ha sido acelerado y se mantendrá en ese ritmo, precisando que de 2009 a 2020 va ser de 11 millones que se tiene que distribuir en los próximos años.
Ante ello se requiere regular la situación para evitar que este hecho se traduzca en menor calidad de vida para la gente, destacando que el problema se dio porque el sistema financiero en México se alineo para que funcionara como un esquema de gran fluidez en la generación de recursos, la instrumentación de créditos y la individualización al comprador pero no se unió a un sistema igual de suelo urbano. Ello provocó el gran desorden que se ve ahora en el que los conjuntos habitacionales están lejanos y con una estructura orgánica en una mayoría carente de servicios.
Refirió como ejemplo que la distancia promedio de los centros urbanos a los nuevos desarrollos en 1996 era de 5 a 6 kilómetros y en 2006 el promedio llegó a ser de 21 kilómetros con casos de 40 y 45 kilómetros de distancia del centro urbano, lo cual evidentemente es un desgaste muy grande con grandes costos de transporte.
Poniendo como ejemplo Tijuana señaló que en 1990 la población era de 750 mil habitantes y el área era de 5 mil hectáreas en toda la ciudad pero en 2005 la población creció al doble, a un millón 400 mil, pero el área urbanizada creció 5 veces, “este indicativo hace que la ciudad se vuelve inhabitable pues no es sustentable ni económicamente, ni ambientalmente, ni socialmente (…) no hay suelo más caro para mantener que este”.
Añadió que ante ello se necesitan cambios pues es evidente que habrá una mayor demanda de vivienda a la que hay que responder por lo que de 1991 a 2006 se dieron 6 millones de créditos y de 2007 a 2012 se quieren dar 6 millones más de forma que el impacto que ello tiene en desarrollo urbano es muy grande.
Indicó que la constante movilidad de las ciudades nos ha vuelto un país eminentemente urbano en el que hay 358 ciudades de más de 15 mil habitante en que vive el 73 por ciento de la población y de ellas nueve metrópolis son de grandes dimensiones.
Apuntó que ante esto existe la necesidad de la conformación de nuevos polos y regiones de crecimiento con la consolidación de los existentes, enfatizando la necesidad del fortalecimiento de desarrollos urbanos integrales sustentables que se refiere a la creación de pequeñas ciudades dentro de la ciudades, de forma que los conjuntos habitacionales deben cubrir con servicios específicos de clínicas, escuela y demás.
Resaltó que el reto urbano es importante porque en estos lugares se gesta el 95 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), “se tiene un reto de atender ciudades y al mismo tiempo atender el desarrollo de sistemas urbano rurales parea proteger el campo y que siga siendo productivo”.
